
De entrada el anillo, por así llamarlo, es un super pedrusco diseñado por Lorraine Schwartz, el mismo que diseñó el de Blake Lively o Beyoncé. Con tal anillo, nada más y nada menos que un diamante de 15 quilates, Kim no se podía negar, pero no solo eso, Kanye West tuvo que hacerlo aún más espectacular.
El rapero y padre de su hija, North West, le pidió matrimonio a Kim Kardashian como todas soñamos: alquiló el estadio de béisbol AT&T Park de San Francisco, y con músicos y una enorme pantalla que decía “Pleeease marry meee!!!!” (cásate conmigo por favor), le pidió a la popular Kardashian matrimonio. Kim aceptó, sin dudarlo un segundo.
¡Un 10 para los hombres románticos como Kanye!
Imagen: Instagram
No hay comentarios:
Publicar un comentario